Viernes, 7 de abril del 2023
Color: ROJO
- Primera lectura. Is 52, 13-53,12: “Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo su camino; y el Señor cargó sobre él todos nuestros crímenes”.
- Salmo Responsorial: 30,2.6.12-13.15-16.17 y 25: “Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu”.
- Evangelio. Jn 18,1-40;19,1-42: “E, inclinando la cabeza, entregó el espíritu”
“Esta prueba de un amor, que nunca nadie nos dio, es del hombre que al morir fue vencedor”
Hoy, Viernes Santo, celebramos la muerte del Señor. El autor de la vida muerto en una cruz es un misterio que sobrepasa nuestro entendimiento. El misterio de la muerte del Señor debe pensarse, meditarse, sentirse y vivirse junto con el misterio de la resurrección. De hecho, la pasión, muerte, resurrección y glorificación del Señor Jesús es un solo misterio. La muerte y el mal no tienen la última palabra. Al final, triunfa la Vida.
Acabamos de leer el relato de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, narrado por el evangelio de San Juan. Vamos a centrar nuestra reflexión de este texto sobre la persona de Jesús: sus hechos, palabras y actitudes, tratando de ver cuánto le costó el que podamos tener hoy la paz y el gozo de que nuestros nombres están escritos en el Libro de la Vida.
San Juan nos muestra un Jesús que, en medio de la adversidad:
- Es obediente a la voluntad del Padre, “hasta el final”, a pesar de lo difícil que era para Él soportar el peso todos nuestros pecados: “El cáliz que me ha dado mi Padre, ¿no lo voy a beber?“
- Asume con valentía y decisión su pasión y muerte: se presenta ante quienes vienen a capturarlo (“Yo soy”), responde con firmeza al Sumo Sacerdote (“He hablado abiertamente… en la sinagoga y en el templo”) y a Pilato (“el que es de la verdad, escucha mi voz”).
- Reprende el mal: enrostra al soldado que le abofetea en el Sanedrín, llama pecador a Pilato, señala que los que lo entregaron tienen un pecado mayor.
- Cuida a los suyos, como Buen Pastor: “No he perdido a ninguno de los que me confiaste”.
- Es “testigo de la verdad” y proclama que “Para esto he nacido y venido al mundo”.
- Acepta ser reconocido como Rey, pero aclara: “Mi reino no es de este mundo”.
- Y después de comprobar que “Todo se ha cumplido”, “entregó su espíritu”. Entregó hasta la última gota de sangre: de su costado “brotó agua y sangre”.
Cada palabra, gesto y actitud de Jesús durante su pasión es enseñanza para nosotros y nos invita a ser obedientes a la voluntad de Dios, ser valientes y decididos en nuestras responsabilidades, reprender el mal, cuidar a los que dependen de nosotros, ser testigos de la verdad y entregar nuestra vida a Dios.
Pero la muerte del Señor Jesús es mucho más que una enseñanza. La muerte del Señor es el remedio de Dios al más grave de todos los problemas: el muro de separación que creó el pecado entre Dios y los seres humanos. Con su muerte en la Cruz, Cristo vence sobre la muerte, sobre el pecado y sobre Satanás. En una sola frase, san Juan Crisóstomo resume la esencia de la celebración de hoy: “La muerte del Señor mató la muerte”. Un antiguo canto reza: “Esta prueba de un amor, que nunca nadie nos dio, es del hombre que al morir fue vencedor”.
Es lo que nos anunció siglos antes de suceder el profeta Isaías, en sus cantos del siervo de Yahvé: “Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores”, “Él fue traspasado por nuestras rebeliones”, “Él sufrió el castigo que nos trajo la paz” “sus cicatrices nos curaron”.
El texto de la carta a los hebreos que hemos leído termina dándonos el vivificante anuncio de que Cristo “llevado a la consumación, se ha convertido para todos los que le obedecen en autor de salvación eterna”.
De esta manera, la muerte del Señor no es motivo de pesar. La Iglesia no está de luto. La Iglesia hoy está de fiesta: «Porque nuestro cordero pascual, Cristo, ha sido inmolado. Así que, celebremos la fiesta» (1 Cor 5,7-8).
“La muerte del Señor mató la muerte” y nos abrió las puertas de la eternidad: “Acerquémonos con seguridad al trono de la gracia para alcanzar misericordia”.
(Guía Mensual)
Únete a nuestro grupo de WhatsApp en este enlace: https://chat.whatsapp.com/KfASQGAloHWLNC6i3MEb4
********
Lecturas Homilías Moniciones Oración de la noche
829 694 1948. Anote este número. Y este correo-e: aire96fm@gmail.com y escríbanos para mantenerse informado de las novedades y actualizaciones de esta página ¿Le gustaría recibir nuestro boletín semanal por correo electrónico? suscríbete entrando aquí.
Queremos orar contigo, llena el siguiente formulario y estaremos orando por ti y tus necesidades. Dios es quien hace la obra, nosotros te acompañamos clamando por ti: AQUÍ.
Santifiquemos la Semana Mayor * Volver a la página de inicio