Sábado, 6 de abril del 2024
Moniciones: II Domingo de PACUA. Ciclo B
Color: BLANCO
- Primera Lectura. Hch 4, 13-21: “Es evidente que todo Jerusalén conoce el milagro realizado por ellos”.
- Salmo Responsorial: 117, 1.14-15.16ab-18.19-21: “Te doy gracias, Señor, porque me escuchaste”.
- Evangelio. Mc 16, 9-15: “Vayan al mundo entero y proclamen el Evangelio a toda la creación”.
“Anunciando la Buena Nueva con acciones y palabras”
ENTRADA:
Queridos hermanos en cristo que nos ama, muy buenos días, tardes o noches.
La liturgia de la palabra nos invita a anunciar la Buena Nueva.
Tenemos que dejar que Cristo entre en nuestros corazones y nos transforme, porque sólo así podremos ser sus mensajeros y llevar la alegría al mundo de hoy, que tanto necesita de un mensaje de esperanza. También nos hace ver que nosotros somos esos mensajeros que somos como una luz en medio de la oscuridad, que prepara los corazones para el encuentro con Cristo.
Lectura del Libro de los Hechos de los Apóstoles (4, 13-21)
Es importante para nosotros tener una experiencia viva con Cristo, y poder contar a otros nuestro testimonio.
Lectura del Santo Evangelio según San Marcos (16, 9-15)
Donde quiera que estemos, tenemos el desafío y la oportunidad de anunciar la Buena Nueva, con nuestras buenas acciones y palabras.
Oración Universal:
El que preside: Elevemos nuestra oración a Dios Padre, pidiéndole que nos dé fuerza y nos sostenga en nuestro camino, para que nos mantengamos fieles a la misión que nos ha confiado. Digamos juntos: “Guía Nuestro camino, Señor”.
1.- Por la Iglesia, para que siempre esté inspirada por un impulso misionero y no se cierre nunca en sí misma ante las dificultades, sino que tenga la valentía para obedecer a Dios evitando sus propios miedos. Roguemos al Señor.
2.- Por los gobernantes, para que comprendan que solo con la conversión al bien y a la vida es posible actuar con sabiduría y trabajar por el progreso y la paz de los pueblos. Roguemos al Señor.
3.- Por los que sufren en el cuerpo y en el espíritu, para que cada sufrimiento encuentre alivio en la caridad fraterna, y sentido y consuelo en la cruz y en la resurrección del Señor. Roguemos al Señor.
4.- Por nosotros aquí presentes, para que el Señor toque nuestros corazones y abra nuestros ojos para que podamos creer a los testigos del Evangelio y reconocerlo en los signos de bien que deja en nuestra vida. Roguemos al Señor.
El que preside: Señor, que invitas a cada hombre a hacerse anunciador de tu Evangelio, haz que caminemos en santidad de vida, para poder obedecer a tu invitación y llevar a todos el anuncio de tu salvación. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Gregoria Mejía Hilario/greymhilario@gmail.com
COMUNIÓN ESPIRITUAL
“Creo, Jesús mío, que estás presente en el Santísimo Sacramento del Altar; te amo sobre todas las cosas y deseo recibirte en mi alma. Ya que ahora no puedo hacerlo sacramentalmente, ven al menos espiritualmente a mi corazón. Como si ya te hubiese recibido, te abrazo y me uno todo a Ti. No permitas, Señor, que vuelva jamás a abandonarte”.
(San Alfonso María de Ligorio).
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