(Memoria Obligatoria: Santos Tito y Timoteo, Obispos)
Viernes, 26 de enero del 2024
Color: BLANCO
- Primera Lectura. II Sam 11, 1-4a.5-10.13-17: “La mujer quedó embarazada y le mandó decir a David: Estoy encinta”.
- Salmo Responsorial: 50, 3-4.5-6a.6bc-7.10-11: “Misericordia, Señor, hemos pecado”.
- Evangelio. Mc 4, 26-34: “Y no les hablaba sino en parábolas; pero a sus discípulos les explicaba todo en privado”.
“La fe se acrecienta así a través de la oración diaria, los pequeños actos de bondad realizados”
Entrada:
Amados hermanos en el amor de Dios muy buenos días/tardes o noches.
La Buena Noticia nos da la
clave para crecer alejados del mal lo encontramos en el misterio del crecimiento de la semilla. Cuando el hombre débil permite que la semilla de la Palabra haga su función dentro del terreno de su vida, crece. El hombre siembra la semilla y esta crece día a día. Los frutos de la siembra cuidada y atendida misteriosamente van echando raíz y brotando desde abajo hacia arriba. Muchas veces no nos percatamos de los frutos que van creciendo por dentro.
En el silencio y al tiempo de Dios dentro de nosotros se van gestando cambios pequeños.
Lectura del Segundo Libro de Samuel (11, 1-4a.5-10.13-17)
Contrasta la integridad y lealtad del humilde soldado con las fallas morales y el uso indebido del poder de David.
Lectura del Santo Evangelio según San Marcos (4, 26-34)
El mensaje evangélico para hoy nos llama a sembrar la semilla de la Palabra con toda confianza y esperanza y cautivados por el Evangelio
Oración Universal:
El que preside: Dirijamos a Dios padre nuestra oración para que a la Iglesia nunca le falte el apoyo de su Espíritu. Digamos juntos: “guía nuestros pasos en la verdad señor”.
Por los cristianos que hoy sufren persecuciones, para que, sostenidos por el Señor, sigan llevando el bello testimonio de su fe con fortaleza y alegría. Roguemos al Señor.
Por el Papa y los obispos, para que, animados por el fervor y por la fe que tuvieron los primeros obispos de la Iglesia, la guíen con fortaleza, caridad y prudencia, para llevar a los hombres a la fe y darles a conocer la verdad. Roguemos al Señor.
Por las vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada, para que el señor Inspire en el corazón de muchos jóvenes el deseo de donar a Él su vida, y ponga en su camino personas capaces de ayudarles a dar un nombre a su deseo de responder con alegría y confianza a ese amor. Roguemos al Señor.
Por los hombres de gobierno, para que se empeñen en trabajar con laboriosidad y rectitud en un diálogo franco y sincero, abierto a la discusión, a la esperanza y a la colaboración por el bien de la sociedad. Roguemos al Señor.El que preside: Escucha, Señor, nuestra oración, para que, así como con los obispos Timoteo y Tito has guiado a la iglesia en su nacimiento, así mismo ella pueda hoy dar testimonio de ti. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Lervidiana Castro Hernández/lervidianacastrohernandez1976@gmail.com
COMUNIÓN ESPIRITUAL
“Creo, Jesús mío, que estás presente en el Santísimo Sacramento del Altar; te amo sobre todas las cosas y deseo recibirte en mi alma. Ya que ahora no puedo hacerlo sacramentalmente, ven al menos espiritualmente a mi corazón. Como si ya te hubiese recibido, te abrazo y me uno todo a Ti. No permitas, Señor, que vuelva jamás a abandonarte”
(San Alfonso María de Ligorio).
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