Alberto Linero
Martes, 30 de julio de 2024
Señor mío y Dios mío, quiero ser como Marta, capaz de contarte todo lo que hay en mi corazón. No quiero ocultar nada. Quiero mostrarte mi vida con generosidad y alegría. Mira mi corazón y constata todas las emociones que hay en él. Muchas de ellas no son dignas de un creyente. Otras son manifestaciones del amor profundo que tengo por Ti.
Bendíceme para ser capaz de actuar con inteligencia, responsabilidad y amor, pero, sobre todo, para tratar de actuar a tu manera, mi Dios. Quiero agradecer por todas las personas que me prestan un servicio y que me ayudan a ser quien soy.
También quiero seguir sirviendo con calidad a las personas que me necesitan y me piden colaboración. Ahora, Dios mío, quiero dormir en paz esperando que mañana todo salga bien y pueda alcanzar las metas y objetivos que me he trazado.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén…
¡En la Voluntad de Dios siempre!
JESÚS TOMA MI VOLUNTAD, Y DAME LA TUYA✍.
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