• Primera lectura: Ez 17, 22-24: “Derribo el árbol empinado y hago crecer el humilde”.
  • Salmo Responsorial: 92(91): “En la vejez seguirá dando fruto”.
  • Segunda lectura: II Cor 5, 6-10: “Seguridad en Dios”.
  • Evangelio: Mc: 4, 26-34: “¿Con qué podremos comparar el Reino de Dios?”.

Color: VERDE

Lectura del Libro de Ezequiel

Así dice el Señor Dios: «Arrancaré una rama del alto cedro y la plantaré. De sus ramas más altas arrancaré una tierna y la plantaré en la cima de un monte elevado; la plantaré en la montaña más alta de Israel; para que eche brotes y dé fruto y se haga un cedro noble. Anidarán en él aves de toda pluma, anidarán al abrigo de sus ramas. Y todos los árboles silvestres sabrán que yo soy el Señor, que humilla los árboles altos y ensalza los árboles humildes, que seca los árboles lozanos y hace florecer los árboles secos. Yo, el Señor, lo he dicho y lo haré”.

Palabra de Dios

R/. Es bueno dar gracias al Señor

Es bueno dar gracias al Señor y tañer para tu nombre, oh Altísimo, proclamar por la mañana tu misericordia y de noche tu fidelidad. R/.

El justo crecerá como una palmera, se alzará como un cedro del Líbano; plantado en la casa del Señor, crecerá en los atrios de nuestro Dios. R/.

En la vejez seguirá dando fruto y estará lozano y frondoso, para proclamar que el Señor es justo, que en mi Roca no existe la maldad. R/.

Lectura de la Segunda Carta de San Pablo a los Corintios

Hermanos: Siempre tenemos confianza, aunque sabemos que, mientras vivimos en el cuerpo, estamos desterrados lejos del Señor. Caminamos sin verlo, guiados por la fe. Y es tal nuestra confianza que preferimos desterrarnos del cuerpo y vivir junto al Señor. Por lo cual, en destierro o en Patria, nos esforzamos en agradarle. Porque todos tendremos que comparecer ante el tribunal de Cristo, para recibir premio o castigo por lo que hayamos hecho mientras teníamos este cuerpo.

Palabra de Dios

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos

En aquel tiempo decía Jesús a la multitud: «El Reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra. Él duerme de noche y se levanta en la mañana; la semilla germina y va creciendo sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo la cosecha ella sola; primero los tallos, luego las espigas y después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega”.

Dijo también: «¿Con qué podemos comparar el Reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después, brota, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros pueden cobijarse y anidar en ellas”.

Con muchas parábolas parecidas les exponía la Palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas; pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.

Palabra del Señor

“Creo, Jesús mío, que estás presente en el Santísimo Sacramento del Altar; te amo sobre todas las cosas y deseo recibirte en mi alma. Ya que ahora no puedo hacerlo sacramentalmente, ven al menos espiritualmente a mi corazón. Como si ya te hubiese recibido, te abrazo y me uno todo a Ti. No permitas, Señor, que vuelva jamás a abandonarte”.

 (San Alfonso María de Ligorio).

Si deseas recibir las moniciones en tu móvil por WhatsApp, únete a este grupo: https://chat.whatsapp.com/JuAEJ8FhOoS3UDIokzKiTG

Lecturas      Homilías     Moniciones    Oración de la noche

Anote este número. 829 694 1948 y este correo-e: aire96fm@gmail.com y escríbanos para mantenerse informado de las novedades y actualizaciones de esta página  ¿Le gustaría recibir nuestro boletín semanal por correo electrónico?

Suscríbete entrando aquí. Queremos orar contigo, llena el siguiente formulario y estaremos orando por ti y tus necesidades. Dios es quien hace la obra, nosotros te acompañamos clamando por ti: AQUÍ.

¡Carlo Acutis será pronto el primer santo millennial!

Un miembro de mi familia se divorció, ¿Ahora qué pasa?

El empeño de Francisco para el Jubileo de 2025: «Abriré una Puerta Santa en una cárcel»

“Jesús era un hombre libre”, dice el Pa Francisco

Escuche aquí el Evangelio para HOY