Domingo, 11 de junio del 2023

II Semana del Salterio

  • Primera lectura:Os 6, 3-6: Quiero amor y no sacrificios; conocimiento de Dios…
  • Salmo Responsorial: 49, 1.8.12-15: No te reprocho por tus sacrificios.
  • Segunda lectura:Rom 4, 18-25: Cuando ya no había esperanza, siguió esperando.
  • Evangelio: Mt 9,9-13: No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos.

Color: VERDE

“LO MIRÓ CON EL CORAZÓN”

Por P. Wilkin Castillo, San Juan de la Maguana

Una vez celebrada la solemnidad de la santísima Trinidad, Jesús Sumo y Eterno Sacerdote y en este jueves pasado celebrar la Solemnidad de Corpus Christi, nos concentramos hoy en la celebración del décimo (X) domingo del Tiempo Ordinario. No podemos olvidar que la Santa Misa es la fiesta de la vida de la alegría y del gozo en Jesús, que profesamos hace poquito, se ha quedado presente y vivo en el pan y en el vino consagrado.

 Hoy me quiero detener un poco en esta primera lectura del Profeta Amós, en la misma de forma categórica se nos hace una invitación puntual al decirnos: “Esforcémonos por conocer al Señor”: su amanecer es como la aurora y su sentencia surge como la luz. Bajará sobre nosotros como lluvia temprana, como lluvia tardía que empapa la tierra. Llega a mi memoria una frase poderosa del salmo 150, todo ser que respire alabe al Señor.

Reconocer al Señor y alabarle es un acto de amor, es darnos cuenta que en Él vivimos nos movemos y existimos en palabras del Libro de los Hechos de los Apóstoles. “Porque quiero misericordia y no sacrificios, conocimiento de Dios más que holocaustos”. Son palabras poderosas, pues en el querer de Dios es más valeroso un acto puro de misericordia que innumerables sacrificios. Vale más el conocimiento de Dios y el temor de Dios que todos los holocaustos ofrecidos a él sin conocerlo.

Esta es la razón por la cual en el estribillo del salmo nos responden de la siguiente manera: Al que sigue buen camino, le haré ver la salvación de Dios. Esta fue la experiencia deAbrahán, que se nos narra en la carta a los Romanos, se nos dice que este hombre apoyado en la esperanza creyó, contra toda esperanza, y que llegaría a ser padre de muchas naciones.

El Evangelio es el famosísimo pasaje del llamado de San Mateo, aquí comienzan diciéndonos:

 En aquel tiempo, vio Jesús a un hombre llamado Mateo sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: “Sígueme.” Él se levantó y lo siguió. Es interesante preguntarnos qué vio Jesús en Pedro que muchos de sus contemporáneos no pudieron ver, quizás de entrada aquellas personas estaban prejuiciadas y esto no le permitió descubrir en Pedro lo que descubrió Jesús en él. Posiblemente Jesús descubrió en este hombre una resiliencia, capacidad, firmeza y constancia en su oficio y Jesús estaba buscando todo esto al momento de elegir el grupo de los discípulos.

“Y estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos”. No todo el que se sienta a la mesa con nosotros es de fiar, los fariseos y publicanos se sentaron a la mesa no a compartir, sino más bien a murmurar, es por esto que preguntaron a los discípulos: “¿Cómo es que su maestro come con publicanos y pecadores?” Jesús lo oyó y dijo: “No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos”. Por las palabras que Jesús les ofrece a los fariseos y publicanos, nos damos cuenta que el Maestro y estos dos grupos estaban viendo dos realidades muy distantes la una de la otra, mientras Jesús se detuvo a mirar el corazón y la grandeza de Pedro ellos miraban la miseria y las limitaciones de Pedro.

Es por este motivo que Jesús les ofrece una última recomendación. Anden, aprendan lo que significa “misericordia quiero y no sacrificios”: que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. Hagamos todos un esfuerzo por ver siempre en los demás sus dones, carismas, capacidades y no sus miserias, incapacidades y limitaciones humanas.

Otros temas del padre Wilkin

Santísima Trinidad.  Ciclo A. 4 de junio del 2023

Domingo de Pentecostés

VI Domingo de Pascua. Ciclo A: Cuestión de amor

V Domingo de Pascua. Ciclo A: MANTENER LA FIRMEZA

Si deseas recibir en tu móvil por WhatsApp, une a este grupo: https://chat.whatsapp.com/KUofplJqn9v4YmiOuRpJF0

Lecturas      Homilías     Moniciones    Oración de la noche

Anote este número. 829 694 1948 y este correo-e: aire96fm@gmail.com y escríbanos para mantenerse informado de las novedades y actualizaciones de esta página  ¿Le gustaría recibir nuestro boletín semanal por correo electrónico? Suscríbete entrando aquí. Queremos orar contigo, llena el siguiente formulario y estaremos orando por ti y tus necesidades. Dios es quien hace la obra, nosotros te acompañamos clamando por ti: AQUÍ.

Vicaría Territorial Santo Domingo Este, camina con Jesús Eucaristía