Martes, 14 de enero del 2025
- Primera lectura. Hb 2,5-12: “Anunciaré tu nombre a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabaré”.
- Salmo Responsorial: 8,2a y 5.6-7.8-9: “Diste a tu Hijo el mando sobre las obras de tus manos”.
- Evangelio. Mc 1,21-28:“Hasta a los espíritus inmundos les manda y le obedecen”.
Color: VERDE
“Te suplico Madre Mía, que salves a este pueblo”
Somos su pueblo y ovejas de su Rebaño. En nuestro caminar nos acompaña y guia María, la Divina Pastora, Madre de Nuestro Señor Jesucristo y Madre nuestra. Ella porta en su mano un cayado con el cual protegió a su Hijo, al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, protege hoy en día a cada uno de nosotros de los ataques del lobo maligno que esta al asecho entre los árboles del bosque oscuro. A ella pedimos su auxilio por los que sufren por los desastres que provoca la naturaleza, por los enfermos a causa de las epidemias y por los angustiados a causa de la pérdida de sus trabajos para que ella les dé la fuerza para reconstruir sus viviendas, batallar por su salud física y mental, así como esforzarse en buscar y mantener sus trabajos con dedicación y afán. Pidamos a ella diciendo: «Virgen Santísima, Divina Pastora, en aras de la Justicia Divina, por el bien y salvación de este pueblo te ofrezco mi vida. Madre mía, Divina Pastora, por los dolores que experimentó tu divino corazón, cuando recibiste en tus brazos a tu Santísimo Hijo en la bajada de la Cruz, te suplico Madre Mía, que salves a este pueblo».
P. Manuel García: epam45@gmail.com
Aquí podrás escuchar el Evangelio y la reflexión para hoy:
Si deseas recibir en tu móvil por WhatsApp, únete a este grupo: https://chat.whatsapp.com/LpG5T2vq07kFMUGgU8WeUc