Alberto Linero
Martes, 9 de abril de 2024
Señor mío y Dios mío, cierro mis oídos a las palabras que pronuncian aquellos que no me aman y quieren verme destruido.
Cierro mis oídos ante los juicios de los envidiosos que quieren lo poco que tengo.
Cierro mis oídos a esas opiniones de los que no conocen mi vida y buscan que yo te deje y acepte como referencia de mi vida a los dioses de este mundo.
Cierro mi corazón a todo sentimiento de odio y de venganza.
Cierro mi mente a los pensamientos de maldad que a veces vienen a mí como una manera de responder a lo que los otros hacen.
Ahora, cuando me preparo para dormir en tu presencia te suplico que me des paz y serenidad para que la vida descanse en Ti y no en nadie más. Todo lo pongo en tus manos porque sé que contigo soy más que feliz.
Cuídame de los que no me quieren.
Dame tu amor como escudo y tu palabra como defensa.
Te amo.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén…
¡En la Voluntad de Dios siempre!
JESÚS TOMA MI VOLUNTAD, Y DAME LA TUYA✍
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